lunes

El Masaje del Yoni


La palabra Yoni proviene del Sánscrito y significa literalmente “Espacio Sagrado” o “Templo Sagrado”, y se utiliza para referirse a la vagina. En Tantra, el Yoni es contemplado desde una perspectiva de amor y respeto.
En el masaje del Yoni hay dos protagonistas: la mujer, que actúa como receptor y su pareja, que actúa como donante. El objetivo de este masaje es que el receptor alcance una relajación con el propósito de que posteriormente pueda experimentar un mayor placer en el transcurso de la relación sexual. El donante experimentará la satisfacción de haber ayudado a su pareja y haberla llevado hasta ese momento de “Gran Despertar”. No hace falta decir que este acto puede ser utilizado como preludio de una relación sexual con penetración o, simplemente como un acto sexual en sí mismo, esto deberá ser consensuado en pareja antes de comenzar. También se utiliza para crear un clima de confianza e intimidad entre ambas partes, lo que termina siendo beneficioso para todas las parcelas de la vida en común y no sólo para el sexo.
Antes de comenzar con el masaje propiamente dicho hay que crear un clima de complicidad con abrazos, besos y demás demostraciones de cariño que son necesarias y a las que a veces no prestamos atención. Es muy importante que haya un continuo intercambio de miradas durante todo el proceso.
Es ahora cuando se debe aplicar una pequeña cantidad de lubricante en el monte de Venus para que gotee sobre la parte exterior de la vagina. Se empieza acariciando largamente esta parte externa. Es importante que el donante disfrute dando el masaje y se relaje al igual que el receptor. Se aprieta suavemente el labio externo entre el dedo pulgar y el dedo índice, y se desliza arriba y abajo por toda la superficie de cada labio. Se hace lo mismo con los labios internos. El receptor puede tomar una actitud activa, masajeando sus propios senos, o pasiva, sólo mirando.
En este momento se puede acariciar el clítoris con círculos a derecha e izquierda y apretándolo entre los dedos pulgar e índice.Lenta y cuidadosamente se introduce el dedo corazón de la mano derecha (debe ser ésta por la polaridad en Tantra) en el interior del Yoni. El donante puede explorar en este momento el interior del “Templo Sagrado” masajeándolo suave pero concienzudamente en todas direcciones. Con la palma de la mano hacia arriba se dobla el dedo haciendo contacto con una zona esponjosa bajo el hueso púbico detrás del clítoris. Se habrá alcanzado el punto G o sagrado en Tantra. El receptor puede sentir urgentes ganas de orinar, dolor o placer, cada mujer es diferente. El dedo continúa moviéndose y explorando esa parte, variando la presión y la velocidad. Ahora es el momento de introducir, si el receptor acepta, el dedo anular, con lo que habrá dos dedos dentro del Yoni. Además se puede seguir estimulando el clítoris con el dedo pulgar.
En este momento y según el Tantra se estará sujetando uno de los misterios del Universo en la palma de la mano.
Durante todo este tiempo la mano izquierda del donante puede estar acariciando y masajeando el cuerpo del receptor. Si se opta por estimular el clítoris con esta mano deberá hacerse con el pulgar, apoyando el resto en el monte de Venus. Acariciar los genitales del donante podría desviar la atención y concentración del receptor, verdadero protagonista del masaje. En el caso de que el receptor experimente un orgasmo, puede seguirse con el masaje para intentar “montar la ola”, que en Tantra es una sensación multiorgásmica, pero no es fácil de conseguir y puede requerir años de experiencia.
Cuando el receptor lo desee, el masaje del Yoni habrá concluido, en ese momento se retira la mano lenta y cuidadosamente disfrutando de la sensación de relax e intimidad.
educasexo

jueves

EL MITO DEL ORGASMO VAGINAL


Sobre el orgasmo femenino se han dicho muchas cosas sin conocer los fundamentos anatómico-fisiológicos que hoy poseemos los investigadores de la vida sexual. La absurda distinción entre orgasmo vaginal y clitoridiano proviene de especulaciones que tienen más de un siglo, cuando los conocimientos sexuales científicos eran muy primitivos. De hecho, los primeros estudios sobre la fisiología del orgasmo solo se realizaron en los años 60, por Masters y Johnson.

En realidad, la vagina no es un área de alta sensibilidad y no está preparada para producir orgasmos. Es el clítoris el centro de la sensibilidad sexual - y el que constituye el equivalente femenino del glande, o cabeza del pene. Aunque hay muchas zonas erógenas femeninas, sólo existe una para el clímax: el clítoris.

Todos los orgasmos son extensiones de la estimulación erótica, directa o indirecta, de esta importante zona del cuerpo femenino. Durante el acto sexual tradicional se estimula muy poco el clítoris, porque la pareja se concentra en estimular el glande contra las paredes de la vagina, lo que facilita solamente la consecución del orgasmo masculino.Imaginemos que al principio de las relaciones sexuales la mujer acaricie a su compañero por todos lados, incluyendo el glande de su pene. Luego pensemos que esa mujer, cuando el hombre esta excitado, espere que él llegue a su orgasmo impidiéndole que tenga caricias en el glande, concentrando sus caricias en otras partes de su cuerpo, por ejemplo: los muslos, la base del pene, el vientre, la espalda u otra parte de su anatomía. Así esta mujer sea muy intensa en sus caricias, el cuerpo del hombre tendrá mucha dificultad para llegar a un orgasmo, porque le falta la estimulación en el sitio adecuado: el glande o cabeza del pene.

El orgasmo masculino se dificulta terriblemente si no hay caricias en ese sitio. Lo mismo ocurre con el orgasmo femenino cuando no hay estimulación del clítoris.

En resumen, ninguna mujer es anormal porque necesite, busque o pida caricias en el clítoris para conseguir su orgasmo, al igual que ninguna hombre es anormal porque necesite, busque o pida caricias en el glande para conseguir su orgasmo.¿Qué debemos hacer ante esto?Necesitamos redefinir nuestros conceptos ante la sexualidad. Debemos actualizar nuestros conceptos para crear nuevas pautas eróticas que tomen en cuenta el goce sexual mutuo.

MUCHO OJO, aun cuando la idea del goce sexual mutuo es liberalmente aplaudida por casi todos los expertos, o los manuales sobre el matrimonio, ésta no se sigue hasta su conclusión lógica. Debemos comenzar a exigir que si ciertas posiciones, que ahora se califican de "estándar", no conducen a ambos al orgasmo, ya no sean calificadas como tales. Deben usarse o inventarse nuevas técnicas sexuales para transformar este aspecto particular de nuestra situación sexual presente.

Dr.José Manuel Gonzalez Rodriguez

miércoles

Quiero Hacer el Amor...



Quiero hacer el amor con tacto:
Quiero que nos toquemos con la mirada;
Quiero que nos toquemos con los destellos del corazón
Que nos toquemos con el deseo
Que tu deseo toque el mío;Que mi deseo toque el tuyo
Que nos toquemos con la piel
Que nos toquemos con el pensamiento
Que nuestras desinhibiciones toquen nuestras inhibiciones
Que mi ser toque todo el tuyo,Que tu ser toque todo el mío
Así quiero que hagamos el amor: con tacto

Pablo Neruda

martes

La Apertura del Corazón

La energía del corazón es la energía de la unión, de la fusión con lo que nos rodea. Localizado en el centro del pecho, el corazón es el chakra intermedio de los siete chakras, símbolos del sistema energético Tierra-Cielo que es el ser humano. Por debajo del chakra del corazón se encuentran los chakras ligados al ego, las energías ligadas a la supervivencia, a lo instintivo, a lo emocional inconsciente, al poder. Las energías que han dominado nuestro mundo en los últimos miles de años del periodo de oscuridad que ahora toca a su fin. Por encima del chakra del corazón comenzamos a acceder las energías sutiles ligadas a las dimensiones no materiales, podíamos decir a las dimensiones espirituales. El corazón, considerado siempre por todas las tradiciones espirituales como “la puerta del alma”, es la llave al Espíritu en nosotros, al Ser que realmente somos, a la percepción de la Unidad de todo lo que nos rodea.
Hablamos en este artículo de la “apertura del corazón en el hombre”, no porque en la mujer no sea éste también un trabajo necesario e imprescindible, sino porque es el hombre, como arquetipo canalizador de la energía masculina, el que ha estado y sigue estando, por lo general, más alejado de la energía del corazón. La mujer canaliza de forma natural la energía de lo femenino, de la Diosa, y esta energía es una energía unida al corazón. La mujer siempre ha estado y sigue estando más cerca de la energía del corazón, aunque, tras miles de años de civilización masculina, y de masculinización de la propia mujer, la expresión de esa energía en la mayoría de los casos se reduzca a una conexión mayor con el mundo del sentimiento, teñido de emocionalidad y de inconsciencia. Pero la esencia de lo femenino es la Madre y ésta estará siempre más cerca de la energía de la unión.

El Tantra, como sistema de unir el cielo y la tierra, lo de arriba y lo de abajo, considera la energía del corazón como la energía donde lo demás se alquimiza. El ego, con su visión dualista de separación, de yo y lo de fuera, de amigos y enemigos, de lo que es bueno y lo que es malo, se disuelve en la conciencia de unidad cuando la energía se eleva al corazón. El corazón ha sido siempre mal entendido, confundiéndose con lo emocional. Así cantidad de ataques a todos los niveles y de acciones destructivas en la historia de la humanidad se han justificado y se siguen justificando día a día, porque “salen del corazón”.
Lo emocional es la compulsión ligada al inconsciente, es digamos, la manifestación en la acción de la mente inconsciente y esto es bien distinto del sentimiento puro que proviene del corazón. Como decíamos el corazón es la energía de la unión, del no-yo, del no-dos. Y cuando se está en la energía del corazón es imposible luchar contra alguien, es imposible destruir algo, pues no hay “otro” separado de uno mismo. Desde el corazón, lo “otro” se percibe como uno mismo, y al no haber dos, no puede haber “enemigo”.
La apertura a la energía del corazón es algo necesario e inevitable en el proceso de evolución actual y supone la recuperación e integración de los valores yin, femeninos, en nuestro interior. Tras varios miles de años de era yang, de preeminencia de lo masculino, tenemos ahora, en el nuevo ciclo, la oportunidad de evolucionar a un nuevo ser humano y dejar atrás todos los esquemas basados en el miedo y a separatividad. De crear una nueva Tierra, desde el amor, desde el corazón.


sábado

Donde tengas tu fuerza, esta tu equilibrio.


El Tantra es un proceso por el cual expandimos nuestra energía, la energía de la mente, en la mente siempre, porque aunque salga algo de nosotros siempre revierte en nosotros, es un efecto boomerang que le llamamos "carpa". Yo doy, recibo; dependiendo de lo que doy, así recibo.
Algunas veces, y esto más alla de un principio moral, pensamos que cualquier pensamiento negativo o cotilleo o actitud hacia una persona, aunque no sea conocida por esa persona, no nos involucra y no nos afectará porque no veremos la mano de esa persona que ha activado nuestra química, que hace que nuestros músculos se tensen y que nuestras defensas bajen. Esa agresividad que supertensiona, aún cuando sea muy sutil, nuestro sistema nervioso central, está haciendo que seamos nosotros la víctima del pensamiento negativo que pretende victimizar a otros, y no importa que otros lo oigan, no importa que tú les mires. Eres tú el que te estás comiendo la negatividad que estás mandándoles, nada sale verdaderamente de nosotros en su totalidad. Si mandamos flores, recibimos un baño de refresco y alegría en nosotros mismos, nuestros órganos son más tranquilos y más felices, más en su sitio, mientras que si estamos constreñidos y tensos, quien se está bebiendo la hiel y la mala adrenalina somos nosotros mismos.
Esto, que nos vamos a olvidar dentro de un rato, seguro y seguiremos haciendo el toma y daca, es decir "que si no se enteran, no pasa nada..." es en realidad algo que superar desde el mismo momento. Si entendemos que "El Conocimiento se desprende de la mente, tiene como objeto la mente, se hace a través de la mente".
Por lo tanto, ¿Qué es lo que libera el Tantra? El Tantra libera la energía que esta en la mente. ¿Cómo la puede liberar? Expandiéndola. ¿Qué es una expansión de la mente? El desarrollo de la armonía del cuerpo y la mente.

Javier Plazas